El Helicobacter Pylori es una bacteria que coloniza nuestro estómago.
Estudios recientes(1979) afirmaron que muchas úlceras estomacales y
gastritis eran causadas por esta bacteria.
La prevalencia de personas infectadas por la bacteria, es en torno a una
50% en países desarrollados y a un 80% en países en vías de
desarrollo, aunque las cifras varían en función la estadística.
El tratamiento que propone la medicina actual es tomar a la vez dos
tipos de antibióticos durante 7 ó 14 días, combinándolos con un
protector gástrico.
Hay un porcentaje (entre un 20 y 30%) de pacientes que no
responde al tratamiento antibiótico.
Ese fue mi caso. Después de soportar los efectos secundarios de los
antibióticos y de quedarme con pocas defensas, resultaba que mi
problema digestivo seguía exactamente igual.
El especialista me dijo, que si las bacterias llevaban toda la vida viviendo
conmigo, para qué empeñarnos en matarlas. Tenía que seguir
conviviendo con ellas y tomar un tratamiento cuando sintiera dolores gástricos.
Yo la verdad es que estaba bastante cansada de padecer dolores de
estómago. Sólo la persona que los tiene, sabe que son muy molestos y
cuando te dan las crisis fuertes (sobre todo en primavera y otoño) te
cambia hasta el carácter.
Así que decidí probar un remedio que mi padre me recomendó, ya que a
él le había solucionado totalmente los problemas digestivos que también
padecía desde joven.
Consiste en poner a calentar agua (1 litro y medio aprox) e introducir
una cebolla grande, ó dos medianas y 4 ó 5 dientes de ajo, todo cortado
en trozos. Cuando hierva, dejarla 1 minuto y apartarla del fuego.
Después, dejar reposar durante al menos 8 horas. Pasado ese tiempo se
cuela y nos bebemos ese jugo de cebolla y ajo.
Lo ideal es comenzar tomando dos vasos en ayunas y otros dos antes
de la cena.
Pasados unos meses reducir a un vaso por la mañana y otro por la
noche.
Entiendo que de entrada, no apetezca mucho beberlo. Yo al principio le
añadía miel y limón, después me acostumbré y era como beber agua.
Aunque ha sido un tratamiento largo (de unos cuatro meses), he pasado
de tener muchos problemas gástricos (desde que era niña) a comer todo
lo que me apetece y a no tener ninguna molestia en el estómago.
Teniendo en cuenta que entre las innumerables propiedades de la
cebolla y el ajo se encuentran el hecho de ser antibióticos naturales,
es normal que a la largan acaben con la bacteria.
los animo a que lo prubés, eso sí, debéras ser muy constantes para
erradicar al helicobacter.
También he de decir, que si tienes úlcera gástrica, hemorragias activas o
estáis en tratamiento con anticoagulantes consultés al médico, ya que
en en este caso habría que solucionar el problema agudo antes de
comenzar a tomar este caldo.
A día de hoy sigo tomándo un vaso en ayunas para evitar que la
bacteria vuelva a colonizar mi estómago. Además este jugo
es depurativo, nos ayuda a eliminar toxinas del organismo y por si fuera
poco, también evita que salgan canas y disminuyen mucho la que ya
han salido.
Hay numerosos estudios que concluyen que las canas se deben en su
mayor parte a la reducción de un compuesto llamado catalasa. La
cebolla promueve la producción de ésta.
Además de tomarla podéis haceros una mascarilla con ella ( la cebolla
roja es aún más efectiva).
Hervir 1 litro de agua con 1 cebolla. Cuando esté blanda y el agua se
haya reducido a la mitad, la apartáis del fuego. Dejad reposar la
preparación unas horas y luego la colocas en un frasco atomizador para
aplicarla cada noche durante una semana y después descansar durante
20 días hasta la posterior aplicación.
Espero que les sirvan de algo mis consejos.